¿Eres transportista y te preocupa el estado en el que se encuentra nuestro medio ambiente?

Hoy en día la sociedad está volteando a ver las consecuencias de tantos contaminantes que emitimos y hemos emitido a lo largo de nuestra existencia. Uno de los más importantes es el CO2 generado por automóviles y transportes de logística.

Debido a esto, hemos buscado tomar decisiones que reduzcan en la medida de lo posible los daños ocasionados.  

En los últimos años se han realizado diversas investigaciones para introducir al mercado y a nuestras vidas el uso de eléctricos o híbridos que pretenden sustituir los contaminantes motores de los mismos por otros eléctricos.

Algunas ventajas de implementar este tipo de transportes son:

  • Reducción de ruido en las ciudades.
  • Reducen los factores contaminantes al ser eléctricos en su totalidad, por lo que no producen gases de efecto invernadero.
  • Reducen costos en combustibles.
  • Pueden realizar rutas de transporte de manera eficiente sin renunciar a la sostenibilidad y optimizando los tiempos de repostaje de nuestros camiones.

 Pero claro, como todo en la vida, nada es perfecto, y a pesar de que esto sería una excelente solución para reducir la contaminación, también trae consigo algunas desventajas tales como:

  • Necesitarán entre 100 y 200 km de autonomía como mínimo para llevar a cabo una jornada de trabajo. 
  • Tendrán una velocidad de carga limitada, puesto que una carga entera de un camión que disponga de 100 km de autonomía podría conllevar unas 7 horas.

Sin embargo, el futuro nos advierte que este tipo de camiones será algo inevitable. Aunque algunos transportistas se rehúsan a hacer la transición, en unos años no habrá opción, por lo tanto, resultaría mejor habituarnos al cambio de una vez para así estar preparados.

¿De qué lado estás? A favor de la implementación de camiones eléctricos o en contra debido a sus pequeñas desventajas.